
Entonces verse bien o sentirse bien no debe ser cuestión de opción, sino de inclusión, no importa cual haya llegado primero, ambas componen el lado de una balanza que debes mantener equilibrada. Cuando sientas que debes esforzarte más para verte mejor, consulta con las necesidades de tu organismo hasta dónde llevar ese esfuerzo y ten paciencia, nada se logra de la noche a la mañana.
Add comment